jueves, 13 de septiembre de 2012

Hasta pronto, LMSA.


No sé como empezar esto, son muchas cosas, muchos momentos… porque aunque solo hayan sido 9 meses… Podría pasarme toda una vida hablando de ellos…

Este ha sido mi primer año como universitaria, venía a una ciudad lejos de mi familia y amigos. Prácticamente sola, iba a vivir con niñas que no conocía de nada… y tenía miedo. Miedo de no encajar, miedo de no tener amistades… Miedo de ser un 0 a la izquierda…
Pero no fue así… puede que no tenga todas las amistades que podría, puede que no haya encajado del todo, incluso que sea a veces un 0 a la izquierda… pero ¿sabes qué? Merecío la pena, porque sólo una persona me ha hecho sentir que estoy como en casa… y por ella ha merecido la pena venir aquí, pasar este año lejos de todos.

Si me dieran la oportunidad de volver atrás, de poder elegir destino donde yo siquiera, se me plantea una gran duda, pero volvería a venir aquí, no podría perdonarme no haberla conocido.
Porque una vez que la conoces, quieres tenerla contigo todo el tiempo…  quieres que no se vaya… quieres invadir su cuarto; ya cuando no está, la llamas a todas horas, hablas con ella como sea… porque te falta algo de ti, algo dentro de ti esta incompleto…  y es que notas su ausencia…

Y es que juntas, hemos compartido días y noches, noches y días… conocemos todos los secretos de la otra, o eso creo e.e (¿me ocultas cosas? xD), que pasar 24 horas conmigo pasan factura y te vuelves adicta al rock JAJAJAJA (nah, hombre, yo solo puse mi granito de arena :P).  Porque soy tu perrita, la que no te deja estudiar y se pasa todo el día haciendo el tonto y luego no estudias, distrayéndote con cualquier chorrada… ¡Mira, una mosca! Cantando canciones de cualquier frase que digamos, volviéndonos locas por el estrés. Pero bueno, eso ya se esta remediando… que tenemos que sacar buenas notas amor  :3

Y sabes, voy a echar de menos poder ir a tu cuarto simplemente para decirte una tontería o porque necesite escucharte, para contarme mis gilipolleces y que te rías de mi, o simplemente para darte un abrazo porque ambas lo necesitemos. Porque aunque ya no vuelva a estar más en la primera puerta a la izquierda, siempre estaré para ti cuando lo necesites, y siempre tendrás un hueco muy importante en mi corazón.

Y es que, no puedo decir nada más que darte las gracias por cada consejo, por cada palabra de animo, por cada bronca que me has echado, por ese puente en mi casa, por ese finde en la tuya…  Y es que siempre serás mi hada, en las cuales no creía y tú me hiciste creer.

Te quiero mucho Luisa María Serrano Arjona y te voy a echar mucho de menos.
Recuerda, esto no es una despedida, es un hasta pronto, muy pronto.
Fdo: Cristina Cortés Llovet.


No hay distancia que nos separé, siempre caminaremos juntas.


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